. Los viajes de Hector y Yolanda Los viajes de Hector y Yolanda: Sábado 4 de Agosto 2012-Antalya-Día 14-Parte 2

lunes, 3 de junio de 2013

Sábado 4 de Agosto 2012-Antalya-Día 14-Parte 2

Desde la playa Side donde nos encontrábamos hasta la Cascada de Manavgat hay apenas 10 kilómetros, pero a nosotros se nos hicieron eternos...

Cascada de Manavgat
Cascada de Manavgat.
Cascada de Manavgat
Camaleón.
Primero porque paramos en un bar donde había pollos al ast a comprar uno para comer, pues Izan tenía muchas ganas de comer "algo normal" después de 14 días de viaje, y después porque el GPS nos llevaba a la otra parte de las cascadas desde la que no se ven tan bien y desde donde no hay nada para verlas, ni miradores, ni baños, ni nada, y encontrar el camino nos costó más de una hora preguntando y dando vueltas.

Parte de este recinto está sobre la corriente del agua, de hecho hay un mirador donde te mojas y no veas lo fría que está el agua, imposible estar allí más de un minuto, te duelen los pies de frío...pero en este espacio se puede sentir la fuerza del agua en las piernas.

Cascada de Manavgat.
De picnic en la Cascada de Manavgat.
Una vez pagado el parquing de las cascadas y la entrada al recinto (3,5 TL por adulto) con varios puestos de souvenirs y restaurantes, nos sentamos tranquilamente a la sombra de unos árboles a comernos el pollo comprado antes, y la verdad que estaba buenísimo.

Cascada de Manavgat
Yolanda y Joel en la Cascada de Manavgat.
Mientras comíamos nos dimos cuenta que frente a nosotros, sobre las ramas de unos altos arbustos, "nos observaba" un extraño animal que ninguno de los cuatro miembros de mi familia había visto antes, un hermoso camaleón que se movía lentamente.

Después de un rato de relajación escuchando el sonido del agua al caer en este precioso entorno de vegetación exuberante volvimos hacia Antalya, pero no para ir directamente a la ciudad, nuestra siguiente visita fue Aspendos, situada más o menos a mitad camino, es decir, más o menos 35 kilómetros.

Ya os aviso que en este trayecto vimos un control de velocidad, así que andad con ojo y no corráis si no queréis ser multados...

Aspendos, situada junto al río Köprülü, fue en el pasado la ciudad más oriental del reino de Pérgamo y en época romana un importante puerto comercial. Su principal lugar de interés es el anfiteatro, construido hacia el 162 d.C por Xenón con una capacidad para 15.000 espectadores.

Teatro de Aspendos.
Teatro de Aspendos.
Fiel a la tradición helenística, la mayor parte del teatro se apoya en la ladera de una colina; casi todo el resto del edificio fue construido sobre unas galerías abovedadas que ofrecían una ventajosa situación en cualquier condición climática. La parte superior del alto edificio de la escena, que separa a los espectadores completamente del mundo externo, ha sido restaurada y su acústica ha sido mejorada con la adición de algunos elementos.

El teatro de Aspendos (15 TL por adulto más 5 TL del parquing) ha subsistido hasta nuestros días conservando casi todas sus características originales gracias al hecho de que el edificio de la escena estuvo bien mantenido continuamente por ser utilizado como caravasar (o posada) durante el período selyuquí. Se dice que es el mejor conservado del mundo, y desde aquí,yo recomiendo su visita, pues es realmente espectacular, impresionante e imprescindible.
También hay un acueducto, construido hacia el 100 d. C. y numerosa ruinas, pero nosotros no las visitamos.

A pocos kilómetros, en dirección Antalya, también hay otras ruinas interesantes, las de Perge.

Ruinas de Perge.
Ruinas de Perge.
Aunque algunas fuentes afirman que la antigua ciudad de Perge (15 TL por adulto) fue fundada por tres guerreros veteranos de la guerra de Troya, la historia de la ciudad debe de remontarse hasta una época mucho más temprana ya que una tabla de la época hitita descubierta en Boğazköy menciona el nombre de está ciudad como ‘’Parha’’ y sobre una moneda descubierta en el mismo sitio se lee el nombre de la diosa local de Perge.
Vía principal de Perge.
Vía principal de Perge.
Se sabe que las regiones habitadas durante el II milenio a. de J.C. por los acadios y en el siglo VII a de J.C por los helenos procedentes del Epiro y de las costas de la Anatolia occidental, fueron invadidas en el siglo VI a. de J.C. primero por los lidios y más tarde por los persas. En el año 333 a de J.C. Perge fue tomada por Alejandro Magno y después de su muerte pasó a manos de los Seleucos; más tarde fue sometida por el reino de Pérgamo a partir de siglo II a. de J.C. aceptó la soberanía romana y en el siglo IV adoptó la fe cristiana. Después de las épocas bizantina, selyuquí y del Señorío de Hamitoğulları pasó a formar parte del estado otomano en el año 1391.

Torres helenísticas de Perge.
Su enorme estadio permanece prácticamente intacto aunque el teatro se encuentra en restauración. La entrada está marcada por dos torres helenísticas, tras las que se extiende un patio con una fuente. A la izquierda unos baños con sistema de hipocausto, que miran hacia un ágora porticada.

Ciudad antigua de Perge.
Ciudad antigua de Perge.
No me parecieron nada del otro mundo comparadas con todas las ruinas vistas hasta el momento, así que para mi son prescindibles, sin embargo había leído muy buenas críticas sobre Perge, así que creo que será cuestión de gustos, así que si tienes tiempo tampoco pierdes nada por visitarlas.

Ciudad antigua de Perge.
Perge.
El teatro está fuera del recinto, pero después de Aspendos dudo que pueda sorprender, así que nosotros no lo visitamos.

A sólo 17 kilómetros al Oeste de Perge está el centro de Antalya, donde dormíamos, pero un poco más al Este del centro, junto al mar, se encuentran las terceras cascadas o cataratas que pudimos visitar en el día de hoy. 

Cascadas Karpuzkaldiran.
Cascadas Karpuzkaldiran.
Las espectaculares Cascadas Karpuzkaldiran, son exactamente la desembocadura del río Düden al Mar Mediterráneo, es decir, son el final de este río que se precipita al mar en forma de unas cascadas de alrededor de 30 metros de altura.

Cascadas Karpuzkaldiran.
Caída de las Cascadas Karpuzkaldiran.
Tras unos minutos disfrutando de las vistas volvimos a nuestro alojamiento y después de cenar nos fuimos a dormir, estábamos realmente cansados después de un largo e intenso día.

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