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jueves, 20 de marzo de 2014

Fin de semana en Requena, Sábado, Casa de la seda y Restaurante Los Cubillos. Parte 3

Continuamos nuestra visita a Requena en este artículo.

Requena, Casa de la Seda.
Fachada de la Casa de la Seda.
Para el final dejamos lo que a priori nos parecía más interesante y no nos equivocamos, para mi de lo mejor de Requena, una de las visitas imprescindibles si estáis por la zona, La Casa de la Seda.

Requena, Casa de la Seda.
Requena, Casa de la Seda.
Requena, Casa de la Seda.
Cocina de la Casa de la Seda.
La misma está situada en un auténtico adarve musulmán o callejón sin salida dentro del recinto amurallado de la ciudad de Requena, en la antigua plazoleta del Pozo, ahora C/ Castillo, nº 5 del casco antiguo de La Villa de Requena, y como ya he dicho sería "pecado" no visitarla.


Requena, Casa de la Seda.
Primera planta de la Casa de la Seda.
Requena, Casa de la Seda.
Salón de la Casa de la Seda.
Según consta en la Historia de Requena, en el año 1740 la casa fue comprada por el Gremio de tejedores de Seda para fines administrativos, convirtiéndose así en la sede de tan importante industria.

Requena, Casa de la Seda.
Seguro que más de uno ha visto a su abuela con esta máquina de coser.
A finales del siglo XVIII, Requena, con sus casi 800 telares en activo, llegó a ser el cuarto centro de producción sedera de toda España, solo por detrás de ciudades tales como Valencia, Toledo y Granada.

Requena, Casa de la Seda.
La ruta de la Seda.
Con la crisis de la Seda, la casa pasó de nuevo a manos particulares, y con el paso del tiempo cambió muchas veces de propiedad, aún así, y a pesar de los siglos, mantiene todavía su original estructura.

Requena, Casa de la Seda.
Requena, Casa de la Seda.
Requena, Casa de la Seda.
Todo tipo de objetos relacionados con la seda.
Requena, Casa de la Seda.
Máquina de bobinar seda.
Consta de planta baja y tres pisos y está decorada con colecciones de todo tipo, centrándose en la historia sedera requenense en la última planta, donde podréis conocer más sobre el arte de la seda con la visualización de un vídeo.

Requena, Casa de la Seda.
Objeto de baño.
Esas colecciones son básicamente todo tipo de artilugios antiguos que usaban nuestros abuelos y sus padres en las casas para hacer su vida diarios, objetos de baño, cocina, habitaciones, salones, etc, todo decorado magníficamente.

Requena, Casa de la Seda.
Requena, Casa de la Seda.
Se crea una atmósfera que te transporta a principios del siglo pasado, con todo tipo de detalles. No me canso de repetir que nos gustó mucho.

Os dejo con un vídeo de La Casa de la Seda, aunque no es nuestro:



Después de la visita volvimos a Casa Lucía a descansar antes de ir a cenar a un restaurante cercano, en la calle de la Fortaleza, frente al Castillo, no tiene pérdida.

Restaurante Los Cubillos.
Fachada del Restaurante Los Cubillos.
El dueño de la casa nos había aconsejado el Restaurante Los Cubillos y la verdad es que estuvo por encima de nuestras espectativas, ya os adelanto que para mi es otra de "las visitas imprescindibles" si venís por estas tierras.

Restaurante Los Cubillos.
El sótano del Restaurante Los Cubillos.
Restaurante Los Cubillos.
Detalles del sótano.
No sólo por sus platos que nos parecieron buenos, exquisitos o excelentes (dependiendo del plato) sino también por el local.

Restaurante Los Cubillos.
Restaurante Los Cubillos.
Restaurante Los Cubillos.
La familia cenando.
Comimos en la planta baja, la "cueva" del local, perfectamente restaurada, que tiene como muro parte de las antiguas murallas del castillo, pues se trataría del antiguo foso del castillo. Precioso.

Restaurante Los Cubillos.
Surtido de Tempuras.
La cena empezó con unos platos de Calamares Rebozados y de Sepia para picar que devoraron tanto Izan como Joel y un vino muy bueno de D.O. de Requena.

Restaurante Los Cubillos.
Ensalada de los Cubillos.
En vez de un menú típico o de degustación optamos por que fueran trayendo platos distintos más pequeños de lo habitual para probar cuantas más cosas mejor y empezamos por un Surtido de Tempuras y una Ensalada de los Cubillos con un tomate realmente delicioso.

Restaurante Los Cubillos.
Embutido de Requena.
Los niños se comieron un plato de Longanizas y Chuletas de Cordero con Patatas Fritas mientras iban probando alguna cosa, como el Embutido de Requena, famoso no sólo en la ciudad, lo más típico de aquí junto con el vino.

Restaurante Los Cubillos.
Crujiente de Morcillas y Espinacas y de Queso de Cabra con Mermelada de Tomate.
Después llegó un plato con Crujiente de Morcillas y Espinacas y otro Crujiente de Queso de Cabra con Mermelada de Tomate Casera. Para chuparse los dedos, sobre todo la mermelada, que cosa más rica.

Restaurante Los Cubillos.
Surtido de Tempuras.
A continuación sacaron otro plato con un Surtido de Tempuras, pero en esta ocasión con productos del mar, como langostinos y demás.

Restaurante Los Cubillos.
Joel y Yolanda durante la cena.
En todo momento el camarero nos estaba atendiendo de maravilla, pendiente de lo que necesitáramos y explicándonos todos los pormenores tanto de los platos servidos como del local.

Restaurante Los Cubillos.
Brochetas de Sepia y Verduras.
Cuando casi no podíamos comer más llegó un plato con Brochetas de Sepia y Verduras, estaba todo delicioso y ya casi no podíamos comer más...ja, ja, ja...

Restaurante Los Cubillos.
Solomillo de Cerdo.
Llegaba la hora del plato principal y habíamos comido tanto que le pedimos al camarero que en vez de un plato para cada adulto, sacara uno para el centro de donde comeríamos los dos, así que puso un plato de solomillo de Cerdo realmente espectacular, de hecho la semana anterior cenamos en Castellón y un amigo pidió eso y la verdad es que nada tenía que ver, y eso que se trataba del mismo plato. La carne se deshacía en la boca...exquisito.

Restaurante Los Cubillos.
Surtido de Postres.
Después vino el postre o mejor dicho el Surtido de Postres, el momento preferido de los niños, y nos pusieron un gran plato en el centro de la mesa con varios tipos de postre que iban desde la deliciosa tarta de queso, al espectacular flan de café o al casi inmejorable tiramisú con mosto de uva entre otros...de hecho Izan repitió este postre porque es uno de sus favoritos y le encantó.

Restaurante Los Cubillos.
Yo en Los Cubillos con los niños.
Después vino el café, y tras eso nos fuimos a descansar y dormir...nos lo habíamos merecido después de una larga e intensa jornada, pero os dejo con una reflexión, ¿cómo puede ser que navegando en internet puedas encontrar malas críticas de este restaurante?...es cierto que la mayoría de las críticas son muy buenas, lógico, pero las hay tan malas que parece que hayamos estado comiendo en lugares distintos, o bien están hechas a mala fe y de forma intencionada.

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