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martes, 2 de febrero de 2016

Qué ver en La Toscana-Siena-16 de Julio 2015-Parte 1.

El día anterior empezamos nuestra visita por la Toscana en la localidad de Arezzo, que nos dejó muy buen sabor de boca y que aconsejo visitar encarecidamente.

Mapa de Siena.
Mapa de Siena.
Hoy también tocaba desplazarnos con el coche hacia el Sur, unos 70 kilómetros (poco más de 1 hora) para llegar a Siena.

No se puede circular por su centro histórico así que, como la ciudad se asienta sobre una colina, lo ideal es dejar el coche en alguno de los múltiples parquings que hay, o aparcar en las afueras y llegar caminando al centro.


Siena.
Yolanda y los niños en Siena.
La bellísima Siena es una de las ciudades imprescindibles y más conocidas de Toscana, situada al sur de Florencia y al este del pequeño macizo de las colinas Metalíferas. No es una ciudad grande (55.000 habitantes), pero si rica en cultura, con preciosos monumentos, tradiciones y patrimonio, ya que conservó a lo largo de los siglos la apariencia de ciudad gótica, adquirida entre el 1100 y 1400.

Calleando por Siena.
Calleando por Siena.
Su situación es ideal para una visita toscana. Junto a Siena, al Este se halla el Valle del Chianti y un poco más allá el Valle de Chiana (Arezzo, Cortona). Al norte Florencia, Pisa y Lucca. Al sur, pero muy cerca el extraordinario Valle del Orcia, Grosseto, la Maremma y la costa con Elba.

Heladería de Siena...mmmmm...
Heladería de Siena...mmmmm...
El centro histórico de Siena ha sido declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 1995, por considerar que es la encarnación de una ciudad medieval.

La ciudad de Siena es fácil de recorrer y la mayoría de sus callecitas del centro histórico son peatonales, por no hablar de las diferencias con respecto a la todopoderosa Florencia, pues las interminables colas pasaran a ser parte del pasado.


Duomo de Siena.
Duomo de Siena.
Empezamos nuestro recorrido en el Duomo o la gran catedral románico-gótica del siglo XIII, otra de las atracciones imperdibles de la ciudad, con una fachada gótica única por su belleza realmente imponente, obra de Giovanni Pisano, finalizada en 1380.

Duomo de Siena.
Los techos del Duomo.
Si no habéis reservado las entradas por internet (en el enlace de arriba) con antelación o llegáis temprano, os encontraréis grandes colas para sacar los billetes, y tened en cuenta que hay de varios tipos, combinando el Duomo con Cripta, Museo y Battisterio, por lo tanto, de diferentes precios. Para mí, lo imprescindible es la Catedral y el Museo, el resto, aunque interesantes, son visitas menos vistosas.

Duomo de Siena.
Duomo de Siena.
Aunque en principio se pretendía que fuera la más grande del antiguo occidente, no se llegó a terminar en su momento debido a la terrible epidemia de peste negra que asoló a la ciudad, causando la muerte de una gran parte de su población, así como un gravísimo daño económico a Siena. La torre rivaliza con la Torre de Mangia del ayuntamiento.

Duomo de Siena.
Interior del Duomo.
Su fachada, con sus 3 arcos y su rosetón, presenta mosaicos dorados, columnas y esculturas realmente sorprendentes, mientras que los lados de la Iglesia son a rayas negras y blancas, los dos colores de la ciudad.

Duomo de Siena.
Duomo de Siena.
En su interior encontramos otro sinfín de tesoros artísticos, con obras de Pisano, Donatello, Miguel Ángel y Bernini.

Duomo de Siena.
Yolanda dentro del Duomo de Siena.
Duomo de Siena.
Suelo del Duomo de Siena.
Duomo de Siena.
Duomo de Siena.
Particularmente destaca el suelo de la Catedral, que constituye una “Biblia en imágenes”, con 56 recuadros de mármol realizados entre 1369 y 1547 sobre los diseños de grandes artistas como Matteo di Giovanni y Domenico Beccafumi.

Duomo de Siena.
Duomo de Siena.
Personalmente creo que el interior del Duomo es una de las Iglesias más bonitas e interesantes que he visitado nunca, opinión que coincide con la de Yolanda, por lo que ambos os recomendamos su visita.

Duomo de Siena-Biblioteca Piccolomini o Libreria Piccolomini.
Techo de la Biblioteca Piccolomini.
Situada a lo largo de la nave izquierda, antes del crucero, dentro del Duomo, se debe acceder a la Biblioteca Piccolomini o Libreria Piccolomini, ya que la entrada está incluida en el billete de la Catedral.

Duomo de Siena-Biblioteca Piccolomini o Libreria Piccolomini.
Libros de la Libreria Piccolomini.
Duomo de Siena-Biblioteca Piccolomini o Libreria Piccolomini.
Fijaros en el tamaño de los libros.
Fue construido en 1492 por encargo del arzobispo de Siena Francesco Todeschini Piccolomini (más tarde el Papa Pío III) para preservar el rico patrimonio de libros coleccionados por su tío, el Papa Pío II.

Duomo de Siena-Biblioteca Piccolomini o Libreria Piccolomini.
Biblioteca Piccolomini o Libreria Piccolomini.
Duomo de Siena-Biblioteca Piccolomini o Libreria Piccolomini.
Frescos de la Libreria Piccolomini.
Entre 1502 y 1507 fue completamente decorada con frescos de Pinturicchio, con la ayuda del boloñés Amico Aspertini y el joven Rafael Sanzio.

Cripta de la Catedral de Siena.
Cripta de la Catedral de Siena.
Imperdible es conocer la Cripta de la Catedral, descubierta por casualidad en 1999 durante unos trabajos de restauración. Se trata de un salón de 180 m2 con frescos del 1200 totalmente intactos, pues el lugar había sido clausurado en el año 1300.

Cripta de la Catedral de Siena.
Frescos de la Cripta.
Por cierto para acceder a ella se debe salir de la Catedral y tened en cuenta que requiere una entrada o billete a parte.

Siena, Museo dell’Opera Metropolitana del Duomo.
Siena, Museo dell’Opera Metropolitana del Duomo.
La catedral tiene su propio museo, el Museo dell’Opera Metropolitana del Duomo, con esculturas originales provenientes de la fachada de la catedral.

Siena, Museo dell’Opera Metropolitana del Duomo.
Planta baja del Museo dell’Opera Metropolitana del Duomo.
Entre otras esculturas sobresalientes, la gran sala de la planta baja aloja las doce estatuas góticas de Giovanni Pisano, esculpidas entre 1287 y 1297.

Siena, Museo dell’Opera Metropolitana del Duomo.
Sala del Tesoro, reliquias de San Galgano
En la planta superior, en la sala conocida como “La Sala del Tesoro”, se conserva un soberbio relicario de plata y oro, del siglo XIII, que contiene las reliquias de San Galgano (1148-1181).

Siena, Museo dell’Opera Metropolitana del Duomo.
Pintura de Domenico Beccafumi.
La “Sala del Tesoro” alberga también varias pinturas del célebre artista sienés Domenico Beccafumi (1486-1551).

Seguiré el relato en otro artículo.

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