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lunes, 5 de septiembre de 2016

Qué ver en la provincia de Girona-La Casa de Dalí en Portlligat-Parte 8

L'Estartit, donde nos alojábamos, está a casi una hora de Cadaqués, eso siempre y cuando llegues como nosotros, a primera hora, ya que si no es así, se forman colas kilométricas en la carretera de curvas sinuosas construida a principios del siglo XX, que da la bienvenida a un paisaje de piedras, rocas, olivos y mar, pues el pueblo está cobijado por la montaña del Pení (613 metros) y el Puig del Bufadors (431 metros).

Cala de Portlligat, Cadaqués.
La casa blanca es la de Dalí.
Teníamos que estar a las 9:30 en Portlligat, una cala cercana que pertenece a Cadaqués, ya que allí se encuentra la Casa de Salvador Dalí, donde teníamos una visita concertada a las 10:00 y es necesario recoger las entradas 30 minutos antes porque si no es así venderán nuestras reservas.



Cala de Portlligat, Cadaqués.
Cala de Portlligat, Cadaqués.
También es importante que sepáis que sólo se puede visitar en grupos reducidos, por lo que es necesaria la reserva previa. Sin ella os quedaréis sin visitar el interior. La visita dura unos 50 minutos.

Cala de Portlligat, Cadaqués.
Aquí vivía y trabajaba Dalí.
Os recomiendo ir hacia allí en coche y no aparcar en los parquings de Cadaqués, ya que son de pago y están algo alejados de Portlligat.

Cala de Portlligat, Cadaqués.
La Casa de Dalí.
Llegando, justo frente al camping, hay una explanada de tierra y piedrecitas donde podréis aparcar gratis y estaréis en medio justo de Portlligat y Cadaqués, a menos de 10 minutos andando de ambos sitios.

Cala de Portlligat, Cadaqués.
Que cara de no haber roto un plato.
Así pues en unos 5 minutos estábamos recogiendo las entradas a la Casa de Salvador Dalí (ya que íbamos cuesta abajo).

Cala de Portlligat, Cadaqués.
Cala de Portlligat, Cadaqués.
Durante la media hora de espera estuvimos dando una vuelta por la cala de Portlligat, los niños se distraían lanzando piedras al mar, intentando que estas rebotasen varias veces antes de sumergirse por completo...¿quién no ha jugado a eso alguna vez?...

Cala de Portlligat, Cadaqués.
Al fondo se ve a Joel tirando piedras.
La actual Casa-museo de Portlligat fue la única vivienda estable de Salvador Dalí, donde vivió y trabajó habitualmente desde 1930 hasta que, en 1982, falleció su mujer Gala y Dalí fijó su residencia en el Castillo de Púbol.

Cala de Portlligat, Cadaqués.
Casa-Museo de Dalí en Portlligat.
La casa de Dalí tiene su origen en un grupo de barracas de pescadores, donde compró una pequeña propiedad que fue ampliando con el paso de los años. Precisamente, fue en este lugar donde el artista encontró la paz y la inspiración para llevar acabo muchas de sus creaciones artísticas.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Una de las primeras estancias que vimos.
Llegó la hora de la visita a la casa, a la que accedimos una guía, nosotros cinco y otra pareja por la puerta de entrada principal, por donde lo hacían Salvador y Gala.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Esta casa la podríamos dividir en tres ámbitos: donde transcurría la parte más íntima de la vida de los Dalí, el taller, y los patios exteriores.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Hay varios animales disecados en la casa.
Con una estructura laberíntica a partir de un punto de origen, El Recibidor del Oso, la casa se descompone y se retuerce en una sucesión de espacios encadenados por pasillos estrechos, desniveles y recorridos sin salida.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
El Recibidor del Oso.
La primera sala es el Recibidor del Oso, que consta de un oso que la custodia, regalo de Edward James al matrimonio. El Oso sostiene una lámpara, es paragüero, portacartas y arcabucero. Detrás del oso, se encuentra un búho disecado, pero no son las únicas bestias disecadas del lugar, lo que demuestra el gusto del artista por la taxidermia.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Taller de la casa de Dalí.
Una de las habitaciones más importantes de la casa es el taller, una sala, tranquila y muy bien iluminada que todavía conserva caballetes, pinceles, disolventes y demás artilugios.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
La decoración de la casa era como sus obras.
Al lado del taller se encuentra La Habitación de los Modelos con herramientas y aparatos ópticos.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Sala de estas de la habitación de matrimonio.
Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Habitación de Matrimonio de Dalí.
La habitación de matrimonio (los Dalí no tuvieron hijos) es enorme y está a varias alturas, con dos baños, uno para cada uno, y con vistas al mar. En la misma habitación hay una pequeña sala de estar.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
La Sala Oval.
En la casa, al igual que Salvador Dalí, su esposa Gala también tenía un espacio privado denominado La Sala Oval, construida en 1961, donde leía y recibía a visitas distinguidas. La sala es esférica y consta de una acústica reverberante.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
La casa está decorada como cuando vivían los Dalí.
Para acceder a la Sala Oval, primero se debe cruzar el tocador de Gala y La habitación de las fotografías, un vestidor con los armarios repletos de fotos y recortes de revistas, donde la pareja aparece en compañía de personajes de todo tipo, demostrando la gran actividad pública del matrimonio.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Patio exterior.
En la parte exterior, ya visita libre (sin guía), destaca el patio, al que se accede a través de un laberinto que esconde un pequeño comedor de verano. Los elementos decorativos de esta zona son dos jardineras enormes en forma de taza y una reproducción del Ilisos, de Fidias, creada para el Partenón de la Acrópolis de Atenas.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Vistas de la cala desde el patio.
Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
La piscina de la casa.
La parte posterior del patio comprende la piscina, construida en 1967. Posiblemente sea la zona más impactante de la casa debido a su abundante y surrealista decoración, de la cual destaca un sofá labial, reproducciones de Bibendum, surtidores en forma de cisne y carteles de los neumáticos Pirelli.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
Uno de los muchos huevos que decoran el patio.
Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
El Cristo de los Escombros.
Otros elementos que terminan de formar el conjunto de la casa y simbolizan el estilo de Salvador Dalí son los innumerables huevos, las cabezas, el palomar de las horcas y la escultura El cristo de los escombros, hecha con los restos de un diluvio.

Casa Museo Dalí de Portlligat, Cadaqués.
El huevo es sinónimo de vida para Dalí.
Una de las cosas que hicimos para que los niños se divirtieran un poco en los exteriores fue que buscaran el huevo en el que se puede entrar, así, como los patios también son algo laberinticos y a varias alturas, estuvieron distraídos.

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